Supongo que ha llegado el momento
de hacer una valoración del año que acaba. 2013
En España el sentimiento general es
de un mal año, un año pésimo, deplorable, triste y bastante desesperanzador. Y
el por qué no necesita demasiada explicación.
En mi caso, también ha sido un
año malo, probablemente el peor año de entre mis 35, al menos que yo recuerde.
Pero claro mi memoria es corta y los recuerdos manipulables.
Sinceramente y respondiendo a la
pregunta que titula este post, ¿podemos vivir un año peor? Espero enérgicamente que no. Pero la vida es muy
perra, gira y gira y quien sabe…. algún año dentro de otros 35…..
2013 ha sido un año donde
retrocedemos 30 años en algunas cosas, en otras sólo 15 o 20. Pero no se
equivoquen, yo no seré quien busque culpables en otros que no sea el conjunto
de la ciudadanía. Porque no tendríamos estos políticos si fuéramos otros
ciudadanos.
Y esto me lleva a 2014, un año
que hoy se presenta lleno de esperanzas. Pero que, más allá de esas esperanzas,
nos ofrecerá oportunidades de cambiar cosas. ¿Tendremos el valor o quizá la
inteligencia suficiente? ¿Sabremos comportarnos en las Elecciones Europeas?
Permitid mi pesimismo.
Por mi parte, me embarco en una
misión suicida en estos tiempos. Ser mi propio jefe y poder vivir de ello.
Algunos, me consta, están esperando con ardor mi descalabro. Nada que objetar,
simplemente deseo que sigan esperando, ojalá para siempre.
Quizá incluso tenga la osadía de
abrir un nuevo blog sólo para contar desde el primer minuto como me van las
cosas.
Por otra parte estaría feo
nombrar a quien no lo merece y dejar de nombrar a todos los que os lo merecéis.
Todos los que estáis a mi lado, todos los que ofrecéis vuestro ánimo, todos por
los que siento y recibo cariño, o simplemente todos los que sois buenas
personas. A veces con eso es suficiente.
No voy a dar nombres porque la
lista sería interminable, pero me temo que, tanto para unos como para otros,
mis palabras son suficientes porque sabéis que me refiero a vosotros,
QUE ME REFIERO A TI. GRACIAS.
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